“La corrección cambiaria tendrá un salto inflacionario muy fuerte”

Es la mirada del economista rafaelino Fernando Camusso sobre las medidas gubernamentales. “La gran medida es el recorte en casi 5 puntos del PBI para dejar prácticamente en cero el déficit financiero”, opinó en el programa radial “Sábado 100”. Consideró que el mercado tomó bien los anuncios porque los dólares financieros se acomodaron y hoy la brecha está debajo del 30%.

Compartir:

Por Emilio Grande (h.).- Sobre el reciente paquete con las 10 medidas anunciadas por el ministro de Economía Luis Caputo, el economista rafaelino Fernando Camusso opinó sobre el impacto de los principales puntos como ser el dólar oficial a 800 pesos y la liberación de los precios que genera más inflación en los distintos sectores sociales como la clase media, los trabajadores, jubilados y el sector agropecuario.

“Suena rápido la medida cambiaria, es un ajuste no menor porque el salto cambiario es similar al que hubo de la salida de la crisis del 2001 con el famoso 4 a 1, que después se fue corrigiendo con una apreciación real. Hoy estamos en niveles similares, no en términos nominales sino de tipo de cambio real. El salto fue muy brusco y la corrección cambiaria era el que el mercado esperaba no de 800, pero sí más cercano a 700 pesos porque teníamos una brecha entre el dólar oficial y los dólares financieros del 150%. El mercado lo tomó bien porque los dólares financieros se acomodaron y hoy la brecha está debajo del 30%. El mercado le está diciendo al Gobierno que le cree y lo acompaña, los bonos y las acciones subieron, y el riesgo país bajó”, expresó durante el programa “Sábado 100” por radio El Espectador (FM 100,1), conducido por quien firma esta entrevista.

Y agregó: “las medidas son fiscales, la cuestión cambiaria es una corrección y va a tener una consecuencia con un salto inflacionario muy fuerte, pero la gran medida es el recorte en casi 5 puntos del PBI para dejar prácticamente en cero el déficit financiero, pagando intereses de la deuda, lo cual el esfuerzo es muy importante; habrá recortes en varias partidas como las transferencias a las provincias. El punto es ver cuánto de licuación hay en todo esto porque una de las consecuencias serán meses de muy alta inflación, estudios que estiman que diciembre será entre 25 y 30%, enero va a continuar, en febrero podría haber una baja de la tasa o en marzo; será un fogonazo inflacionario. Como los bolsillos vienen muy flacos, si esto no te obliga a recalibrar muy rápido. Cuando las medidas son muy fuertes de liberación de precios y ajustes muy duros debiera haber alguna política de ingreso”.

Mencionó algunos ejemplos: “si se vuelve a poner el impuesto a las ganancias para la cuarta categoría, en términos de salario real se achica el poder adquisitivo, que va a sufrir mucho en los próximos 90 días; lo mismo pasa con los jubilados, si se reserva el derecho de la movilidad jubilatoria y no se ajusta el salario nominal en 60 días, en marzo o abril el poder adquisitivo quedará prácticamente terminado. En la medida que se licúa una parte importante, no creo que esta Argentina resulte tan benevolente con bolsillos tan castigados. Todos los planes de estabilización tuvieron una política de ingresos”.

Más adelante, Camusso aclaró que “la inflación a partir de abril puede empezar a caer lo será por recesión, por eso que Milei habla de estanflación. Vamos a un esquema de auto-regulación de precios, teneos la nafta Premium en $ 800, un dólar oficial, castigando al sector productivo porque el gasoil es insumo, al comercio, al fletero, entre otros sectores; vamos a tener una fuerte voladura en la canasta de alimentos. El ajuste va a ser feroz sobre todo para la clase media y el sector formal asalariado. El problema es adónde vas a limar. ¿Se van a ajustar los salarios públicos o los gastos de la Legislatura? Todos entendemos que se quieran revisar los contratos y los pase a planta del último año. La cuestión central de las medidas pasa por lo social porque no va a resistir tanto, por más que lo haya votado el 56% de la gente y por ahí te obliga a recalibrar muy rápido”.

-Luego del paquete de medidas, el Ministro de Economía anunció que los subsidios se irán quitando paulatinamente y los jubilados tendrán un aumento por decreto, ¿esto actuará como una especie de amortiguador?

-Debiera serlo, esto se mueve mucho por expectativas; si alguna señal de movilidad, por ejemplo, a los jubilados no se hace rápida, qué va a pasar con el sector porque de no recibir algo retrae todos los consumos. Estará la decisión de los vendedores y cómo se trasladará a toda la cadena, si se deja de vender o achicar márgenes. Una política de ingresos hace de amortiguador, el punto es cuándo y cómo se la dice, y cómo se empieza a aplicar porque si se esperan 60 días las cosas se van a complicar y poner difícil. Salimos de una economía indexatoria, los comerciantes recibían la lista de precios y trasladaban a los clientes, para pasar a una economía más de mercado y de auto-regulación, pero eso no es instantáneo.

-Había problemas con el ingreso de productos importados y la autorización de las SIRA (Sistema de Importaciones de la República Argentina) de las empresas para importar, ¿la apertura a las importaciones ayudará a los que exportan y qué pasará con las empresas del mercado interno?

-El mercado interno se retrae, con un programa de shock y ajuste para que haya un salto fuerte en inflación, con una sobrerreacción para que después descienda rápida y no esperar a junio de 2024, es que habrá una recesión, a lo que apunta el Gobierno, y el nivel de actividad va a caer; después va a depender de cada uno de los sectores. Con respecto al comercio internacional, se fijó un nuevo tipo de cambio, en vez de vender a $ 650 el promedio del anterior régimen entre el 50% a $ 360 y el otro 50% con contado con liquidación en el mercado financiero, ahora está más arriba porque te permiten liquidar a $ 800 y un 20% se puede ingresar con contado con liquidación, que te mejora la exportación; en estos días el Banco Central estuvo comprando dólares, está el incentivo para que entren dólares, que aparecerán de la cosecha gruesa. Está la programación del pago de importaciones a 120 días con el BOPREAL (Bonos para la Reconstrucción de una Argentina Libre) para empezar a saldar la deuda que los importadores tienen a un tipo de cambio a $ 800 para futuros dólares. El desdoblamiento continúa, el dólar importador está arriba de $ 900 y el dólar tarjeta $ 1.300; el productor agropecuario está viendo una suba de los insumos y cómo resuelve su ecuación económica. Hay un sinceramiento cambiario del dólar oficial, la brecha del 30% y luego de marzo unificar dependiendo cómo continúe el mercado; las medidas apuntan a dar un mejor precio, liberar las restricciones para el comercio exterior, se caen las SIRA para ir a un sistema automático. Cada importador tiene su deuda con los proveedores y fue muy complejo en los últimos meses. El Ministro dijo que el ancla es fiscal y también hay un ancla psicológica porque en la medida que se vayan corrigiendo los números fiscales hay un acompañamiento y se materialice que no hay emisión ni exceso de gastos la absorción de pesos no queridos va a ser feroz en el mercado, va a nivelar que los precios no se vayan a dólares y el peso recupere un poco de valor. El Ministerio de Economía y el Banco Central están buscando que el mercado se ponga como vendedor de dólares.

Compartir:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *