Cuando el CCIDC compró la sede social y la visita de Frondizi a Rafaela en 1961

Durante la presidencia de Amílcar César Carena, a partir de agosto de 1961 se puso en funcionamiento el nuevo edificio, bien protegido por la Comisión de Preservación y Defensa del Patrimonio Urbano (construido en 1901). El 28 de octubre de 1961 vino a Rafaela el presidente Frondizi para participar del 80 aniversario de la ciudad.

Compartir:

Por Emilio Grande (h.).- Luego de algunos intentos por conseguir la casa propia, el Centro Comercial e Industrial del Departamento Castellanos (después cambió por Rafaela y la Región) adquirió el actual edificio en la esquina de Necochea 84 y 9 de Julio, en 1959 a Francisco Lorenzatti (una de las primeras familias que se radicó en Rafaela), con la aprobación de sus socios en una asamblea extraordinaria, en la suma de 800.000 pesos moneda nacional, escriturada por el escribano Leonildo Alemandi, durante la presidencia de Amílcar César Carena (tuvo dos mandatos de 1957 a 1961), cuyas gestiones se iniciaron en noviembre de 1958.

También integraban la comisión directiva: Ernesto V. Bruera, Juan Skogman, Francisco Gerbaudo, Roberto Pron, Luis Therisod, Carlos Tosini, Bartolomé Cordero, Alfonso Furrer, Juan López Caula, Raúl Briggiler, Italo Picasso, Romeo Molfino, Antonio Andretich, Emilio Piuzzi, Chiafredo Roca y Felipe Panigatti.

A partir de agosto de 1961 se puso en funcionamiento el nuevo edificio, que continúa en la actualidad, bien protegido por la Comisión de Preservación y Defensa del Patrimonio Urbano (construido en 1901), mencionando que hasta ese momento funcionaba en un local alquilado en bulevar Santa Fe 251 primer piso.

«Hoy vemos ampliamente satisfechos estos anhelos con la adquisición del edificio sito en las calles 9 de Julio y Necochea de esta ciudad, cuya suntuosidad y magnificencia son conocidas por la mayoría de los señores asociados», dice el editorial titulado «Edificio propio» en la revista «Orientación empresaria» de enero de 1959.

En la citada revista se dan detalles del nuevo lugar: consta de dos plantas, de sólida construcción, material de primera calidad, más de 30 habitaciones, en muy buen estado, algunas decoradas artísticamente, con una superficie cubierta de 1.200 m2, sobre un terreno de 735,20 m2. «La mayor satisfacción de sus directivos ha de ser la de poder brindar a los señores asociados un mejor servicio, una mayor comodidad, un mayor acercamiento y vinculación entre las distintas actividades de la industria y el comercio. Las cámaras gremiales existentes y las que se formen en el futuro tendrán salones cómodos e independientes, adecuadamente amoblados para poder desarrollar su vida gremial con completa autonomía y sin ninguna interferencia», expresa.

Carena elevó un pedido de contribución para empezar a pagar el edificio adquirido y el costo de las refacciones y ampliaciones, pero la gremial empresaria se vio complicada en el plano económico, y su Presidente tuvo que trabajar para conseguir ese dinero, teniendo en cuenta que algunos socios en ese momento le dieron la espalda.

«Al principio todos los socios estuvieron de acuerdo y se pusieron a trabajar para conseguir fondos, pero ese entusiasmo empezó a menguar y en dos meses casi todos se olvidaron, en una época donde no había dinero en medio de una crisis económica del país. Lo termina pagando mi padre y unos años después dos fábricas cosechadoras de San Vicente colaboraron con algunos aportes. Los integrantes de las comisiones directivas de los últimos 30 años jamás se acuerdan de esa situación», recuerda su hijo Amílcar «Kuky» Carena a este cronista.

Conviene destacar que 1945 se había colocado la piedra fundamental en la esquina de Arenales y bulevar Roca para construir el futuro edificio propio, que luego quedó sin efecto.

Presidente Frondizi

El sábado 28 de octubre de 1961 vino a Rafaela el primer presidente en ejercicio de sus funciones: Arturo Frondizi, quien aterrizó a las 17:30 en el aeródromo rafaelino para participar del 80 aniversario de la ciudad, en el marco de la Semana de Rafaela, participando una multitud.

Los gobernadores Carlos Sylvestre Begnis (Santa Fe) y Raúl Uranga (Entre Ríos), el intendente Rodolfo Muriel y el obispo diocesano Vicente Zazpe habían sido los encargados de darle la bienvenida. Su presencia tuvo cobertura periodística no solamente local sino también de los canales nacionales 7 y 9 de televisión, y LT9 de Santa Fe.

Cuando Frondizi bajó del avión «Independencia», proveniente de la ciudad de Corrientes, fue Carena el que lo trasladó en su auto personal (Lincoln Continental 1947 descapotable) y lo llevó hasta el centro rafaelino, aprovechando el entonces presidente del CCIDC para hacer algunos gestiones para el sector.

Uno de los actos se desarrolló en la plaza 25 de Mayo, donde Muriel dio el mensaje de bienvenida, entregándole las llaves simbólicas de la ciudad a Frondizi, quien seguidamente depositó una ofrenda floral junto al busto del General Mosconi.

La comitiva oficial recorrió la exposición industrial y comercial alrededor de la Plaza hasta la Jefatura durante una semana. Al llegar al lugar donde se honraba la memoria de Guillermo Lehmann, el Presidente depositó bronce para el monumento y Roberto Luisetti, presidente de la comisión de la clase 1911 que propiciaba ese movimiento, entregó a Frondizi un memorial en el que se solicitaba al gobierno nacional un millón de pesos para ese fin.

Ante la consulta de La Opinión, expresó que «tenía el deber de venir a Rafaela para adherir personalmente a la celebración del 80 aniversario de su fundación y ponerme en contacto con sus laboriosos hombres y mujeres. (…) Esta ciudad y la zona constituyen un factor de singular aporte al progreso del país en virtud de la esforzada y provechosa labor desde los primeros colonizadores hasta la evolución alcanzada a lo largo de ocho décadas».

La ceremonia continuó delante de la Jefatura de Policía, donde hablaron Muriel, Sylvestre Begnis y Frondizi (a las 19:35 de esa tarde tomó el avión para Buenos Aires). Luego se realizó un desfile de carrozas, donde cada una llevaba una reina y princesas del barrio o entidad que representaba. La carroza del barrio Villa Dominga portó como testimonio viviente de la difícil época del pasado a Dominga Grande de Tosco, de 90 años, que empuñaba el mismo arado de mancera que tirado por bueyes (se representó en un cartón) abrió los primeros surcos cuando Rafaela nacía. Fue proclamada reina Martha Carmen Curto, de 21 años, perteneciente al barrio Mosconi.

Frondizi había asumido la jefatura de Estado el 1º de mayo de 1958, tras imponerse en las elecciones con el respaldo del peronismo, partido político que se hallaba proscripto desde el golpe militar de 1955. Sin embargo, cinco meses después de participar del 80 aniversario de Rafaela, el 29 de marzo de 1962 fue derrocado por un golpe militar.

Un personaje

Carena fue un personaje de la ciudad, comerciante del negocio de repuestos para el campo y la industria en calle Rivadavia 345 desde 1942 (iniciado por Benedetto Novelli en 1910/11 y actualmente a cargo del Kuky Carena); presidente del CCIDC; director de la Bolsa de Comercio de Santa Fe; amante de la música y compositor, que tocaba de oído cinco instrumentos (violín, piano, acordeón, guitarra, clarinete) los géneros clásico, folclore, tango, bolero, entre otros; inventor de cosas que duraban mucho tiempo. Murió el 10 de mayo de 1970.

Ahora sus familiares están preparando presentar una carpeta en el Concejo Municipal para que le designen una calle con su nombre.

Fuentes: archivo del diario La Opinión; suplemento especial del CCIRR en La Opinión, 2012; actas del CCIRR; Archivo Histórico Municipal de Rafaela.

Compartir:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *