Rafaela: una ciudad de contrastes

Una Rafaela de contrastes. Una ciudad que expresa el desarrollo; en donde sus fuerzas productivas generan empleo, manifestaciones culturales, establecimientos educativos, deportistas, logros y reconocimientos. Pero en estos pequeños conceptos y algunos mas, que seguramente faltan, está expresado el conjunto de la sociedad?

Por Carlos Borgna

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Una Rafaela de contrastes. Una ciudad que expresa el desarrollo; en donde sus fuerzas productivas generan empleo, manifestaciones culturales, establecimientos educativos, deportistas, logros y reconocimientos. Pero en estos pequeños conceptos y algunos mas, que seguramente faltan, está expresado el conjunto de la sociedad? Comenzaremos, entonces, como proponía Paulo Freire, a utilizar la metodología de la pregunta. Cuando Atlético escaló a la Primera División del Fútbol Argentino, muchos rafaelinos manifestaron su preocupación por la llegada de “esas” hinchadas como las de Boca, Colón y tantos clubes del Gran Buenos Aires. Nunca pasó demasiado, la ciudad no fue arrasada. Sin embargo los simpatizantes de dos clubes de la ciudad protagonizaron un enfrentamiento, con fuerzas policiales incluídas, que no resiste el menor análisis. Todos los protagonistas son hijos , vecinos y amigos de cualquier lector de esta nota. ¿ Que nos está pasando?, o mejor dicho ¿Qué expresa ese nivel de violencia?; O la pasmosa serenidad que asumimos en la mesa familiar, en el trabajo o el bar, cuando otro comenta que en tal o cual lugar se vende o consume drogas, como sí los adictos fueran hijos de los polinesios, y no los nuestros. . Un industrial me decía hace ya algunos meses: “…. si todos ponemos un poquito de lo que tenemos, muchos problemas de Rafaela se irían solucionado…” Y es cierto. Ese empresario no hacía referencia a nuestra solidaridad por acercar un remedio o apoyar una campaña, hablaba de colaborar con el Estado y las políticas que se generen desde allí; reconociendo que sin estrategias educativas a la propuesta le faltaría una pata. Ahora bien, El Estado plantea en el presupuesto para el año 2.006, la creación de una Guardia Urbana, con una inversión de casi un millón de pesos. Es decir, en el mejor esquema neoliberal, actúa sobre las consecuencias, en un tema tan sensible como el de la Seguridad, pero no dispone de fondos para una política de minoridad y adolescencia, o incrementos concretos para las tareas de Atención Primaria de la Salud o recursos para avanzar en un Programa a largo plazo de capacitación de jóvenes, saliendo de las experiencias valorables, pero parciales o focalizadas. Y sobre eso, sigue ratificando su exigencialismo; curiosa teoría social que equipara a todos los ciudadanos en sus obligaciones con el Estado, olvidándose de aquella famosa frase -vertebral del Peronismo – por la cual nace un derecho , cuando aparece una necesidad.- Se pone en un mismo nivel a los que ganan 3000 pesos mensuales, los changarines, los empleados y técnicos que recién ahora están insertos en el aparato productivo, a los que fueron expulsados del sistema por las políticas de la década del 90, más allá de la creación de una Comisión Especial para considerar deudas, que está realizando una tarea titánica.- Sería interesante que desde el Estado local, como hace el Presidente Néstor Kirchner con diferentes temáticas, se abra la discusión sobre problemas concretos que tienen los vecinos cualquiera sea su condición socioeconómica. Por ejemplo: debatamos sobre el precio de los alquileres, de los terrenos y de las viviendas. ¿Quiénes forman los precios en esta materia? Son reales, o el bendito mercado hace lo que quiere? Debatamos sobre las retenciones que establece el gobierno nacional, pero también hagamos Proyectos de Declaración pidiéndole a los mismos productores que se quejan, que pongan en blanco a sus trabajadores rurales. Facilitemos el intercambio de ideas, pues criticamos el Plan Estratégico de Rafaela – hasta eso se borró amparados en sus defectos – sin potenciar los logros y la participación de las instituciones de la clase media rafaelina.- Por estas horas se está discutiendo un Proyecto de Presupuesto Participativo, que ya funciona en Rosario, la ciudad Autónoma de Buenos Aires, en Montevideo o Porto Alegre. Una herramienta para fomentar la participación de la gente, en donde el Poder Ejecutivo local y el Concejo Municipal preservan sus potestades. ¿ Es tan antinatural que se le pregunte a las Comisiones Vecinales, y a las instituciones de cada barrio (Cooperadoras, Ongs, Dispensarios, Iglesias, etc.) qué consideran prioritario desarrollar en cada sector de la ciudad? ¿ Es tan “volado” imaginar un proceso de descentralización administrativa, por ejemplo, de la Ruta 34 al oeste – ya viven mas de 22.000 personas- , gestando un ámbito físico concreto donde los vecinos puedan pagar sus impuestos, ser asesorados, realizar trámites, plantear inquietudes? Desde la Reforma de la Constitución Nacional del 94 se siguen perfeccionando o reglamentándose los mecanismos de participación ciudadana. ¿Estamos desde el Estado local fomentando esos instrumentos democráticos? Es interesante cruzar estos elementos, con algunos porcentajes del relevamiento desarrollado en Rafaela por Auditoría Ciudadana en el año 2.003, donde el 33% de los encuestados manifestó –casi textualmente- que no le preocupaba el sistema político en el que vivía, mientras tuviera resuelta su situación económica personal. O sea Democracia y Dictadura, casi lo mismo. Una ciudad no crece sólo con Obras Públicas y una buena política de marketing para hacerlas conocer. Las elecciones demostraron que muchos ciudadanos evalúan, analizan y necesitan otro tipo de respuestas, sobre otras problemáticas, también. Que el ser humano tiene otras dimensiones además del imprescindible pavimento y la calle limpia.- El tema de Vivienda es emblemático. Más allá de los desaguisados producidos en la adjudicación de los planes Fonavi no atribuibles al Estado local, se comenzó a imponer esa frase tan especial de “le dan casas a los de afuera”. En realidad nunca existió la valentía de decir las cosas de frente. La premura en la erradicación de la villa sobre el Ferrocarril Belgrano en el Barrio Italia (años 1992-1993), fue fomentada por algún empresario preocupado por la desvalorización de los terrenos y el temor a que la situación se fuera de control, precisamente allí donde la mayoría de los habitantes de la misma, no tenían mucho tiempo de residencia en la ciudad. Pero nunca se aclaró, debidamente, que eso involucraba a unas cincuenta familias, mientras la realidad marcó, crudamente, que entre 1.991 y 1.995 llegaron aquí mas de 6.000 personas (empleados y obreros), expulsadas de las economías regionales, de los tambos, del ferrocarril, de las fábricas cerradas, que con lo poco que tenían se compraron un terreno, o edificaron en el fondo del patio de la casa de un familiar directo. El Barrio, Guemes, es una buena demostración de ello.- Mientras tanto los rafaelinos de Villa Podio esperaron, sus hijos y nietos, casi cincuenta años para ir saliendo, también al lado de la vía, a una vivienda mas digna. Cuándo existían familias viviendo en y del Basural, cuál debía ser el criterio a aplicar: los años de residencia o la mejora de la calidad de vida? Hoy, existe una asentamiento en el Sureste de la ciudad, donde la mayoría son ciudadanos de Rafaela y permanecen allí en un estricto olvido. Hoy, comienzan a aparecer de manera consistente planes para la clase media, con sueldos mínimos de 900 a 950 pesos los que provienen de la Provincia y 450 pesos los del Plan Federal del Gobierno Nacional. Perfil: los sectores medios y medios bajos. Seiscientas viviendas, como mínimo, a construirse hasta fines del 2006, marcan esta tendencia de forma incontrastable, aunque en el Registro Único de Beneficiarios en el Municipio existen mas de dos mil anotados. Es claro que el sector social que no puede acceder a una casa es aquel compuesto por Jefes o Jefas de Hogar y changarines que necesitarían que se avance con el Plan Lote (ayuda mutua y esfuerzo propio, entre otras características) que, oportunamente, se votó por Ordenanza.- Un dato. En el año 2001, siendo Subsecretario de Desarrollo Humano y mientras arreciaban los comentarios de que la Municipalidad no debería dejar instalar a la “gente de afuera”, o seguir el precepto Obeid de pagarles el pasaje o el tren de retorno; una mujer con seis chicos llegaba sola de Córdoba y conseguía un trabajito para intentar sostener a sus hijos y recurría al Municipio para pedir alimentos. En ese mismo momento, me llamaba, de una escuela, la Directora para ratificar la importancia de esa ayuda, pues ella ya le había dado contención a los chicos “… porque no podían quedarse sin educación…” Un espejo de la perversidad del sistema y de las contradicciones que, muy a menudo, tenemos en la ciudad.- Es decir que valores y contravalores se ponen en juego en cada acción y hecho que el mundo de lo político produce o donde deja de actuar. Se expresan, efectivamente, cuestiones ideológicas y culturales profundas de nuestra sociedad. Frente a esta realidad, el debate está abierto.-

Carlos Borgna

El autor es secretario del Concejo Municipal de Rafaela y fue candidato a concejal en las elecciones de octubre de 2005. Envió este artículo especialmente a la página www.sabado100.com.ar.

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