Mirada crítica sobre Rafaela desde Buenos Aires
A diferencia de otras veces en que destacaban los aspectos positivos de nuestra ciudad y parecía que no había problemas, en esta oportunidad el diario La Nación tituló hace unos días “Rafaela, ciudad modelo, en apuros”. En líneas generales la crónica ilustra lo que está pasando en esta ciudad por la crisis del campo, la sequía y la crisis internacional, pero a decir verdad se repite en otras localidades del país. El periodista Francisco Olivera pregunta en voz alta: ¿Qué pasó con la urbe manufacturera preferida de Cristina Kirchner? Hace un año y medio, tres semanas antes de la elección que la llevó a la Casa Rosada, la Presidenta elogiaba, en un acto de campaña, el comportamiento fabril. “Muchas gracias por el ejemplo”, le dijo al público el 19 de octubre de 2007. Se describen las ofertas y el cierre de locales en bulevar Santa Fe, las caídas en algunos sectores como el metalmecánico que oscilaron entre el 20 y el 50% en relación con 2008, tanto en las plantas Basso como Mahle (esta última trabaja con intervalos). La venta de bienes de capital bajó entre el 50 o 60% en 12 meses y en Megatone –estaría cerca de presentarse en concurso de acreedores- cayeron entre 40 y 50%, perdiendo su trabajo unas 200 personas. Las reservas del Parra Hotel & Suites fueron en febrero un 20% menos que hace un año y Etma sufrió una reducción de ventas entre 40 y 50%. Al respecto, Osvaldo Acastello, directivo de Etma y de la Cámara de Comercio Exterior del CCIR, dice que “el conflicto con el campo y la crisis internacional nos afecta directamente. No hay perspectivas de ventas. Tampoco medidas que permitan vislumbrar una solución en el mediano plazo.” Otro de los problemas abordados es el precio elevado de los alquileres comerciales –de lo que no escapan las casas o departamentos-. Por tal motivo, directivos del Centro Comercial e Industrial analizan con ejecutivos de inmobiliarias para intentar acordar valores más accesibles. Lo que sí faltó en este artículo periodístico fue consultar al intendente Omar Perotti sobre esta difícil situación coyuntural. Pero sus declaraciones no se hicieron esperar y al ser consultado por el diario La Opinión de esta ciudad dijo que “estoy totalmente en desacuerdo con el manejo que viene teniendo el gobierno nacional en este conflicto con el campo (…) no vislumbrándose la intención de buscar un acuerdo sólido y positivo no solo para el campo sino especialmente para el país”. Perotti demoró un año para darse cuenta de la locura kirchnerista al querer imponer la resolución 125 que desembocó en el conflicto con el sector agropecuario y el recordado desempate histórico con el voto no positivo del vicepresidente Cobos. ¿Perotti seguirá sosteniendo el ánimo golpista y destituyente del campo? Lamentablemente, este conflicto volvió reflotarse y sigue perjudicando a Rafaela y una amplia región ligada al campo. ¿Dónde quedó la “ciudad modelo” y la “isla” que era considerada por algunos?