Buenos Aires, 6 Abr. 06 (AICA).- La Comisión Ejecutiva del Episcopado, que preside el cardenal Jorge Bergoglio, visitó este miércoles al canciller Jorge Taiana, con quien dialogó sobre “temas generales” que preocupan a los obispos, sobre todo los referidos a la vida institucional del país y a las dificultades de los sectores más necesitados. También expresaron su inquietud por el conflicto de las papeleras entre la Argentina y Uruguay, que se agudizó con la suspensión de la audiencia entre los presidentes Néstor Kirchner y Tabaré Vázquez, y la reanudación del corte de ruta por parte de los vecinos de Gualeguaychú que consideran contaminantes las plantas de celulosa que se construyen en la ciudad uruguaya de Fray Bentos. Así se lo explicó a la prensa el vocero del Episcopado, presbítero Jorge Oesterheld, quien aseguró que a “la Iglesia le preocupan los desencuentros entre hermanos”, aunque precisó que no ofreció una mediación entre ambos países. El sacerdote explicó que el encuentro de 55 minutos con Taiana “fue una devolución del gesto de cortesía del canciller”, que el pasado 13 de marzo concurrió a la sede del Episcopado. El padre Oesterheld aclaró que la reunión con el canciller no debe interpretarse como una reconciliación porque, afirmó, “nunca hubo una pelea”. Ante la consulta sobre una audiencia entre el Episcopado y Kirchner, el portavoz respondió que “por ahora no hay nada previsto”, pero aseguró que existe una “buena relación” en el nivel de ministros y con la segunda línea de funcionarios. Esta es la primera vez que la Comisión Ejecutiva del Episcopado, especialmente el cardenal Bergoglio, visita el edificio de la Cancillería, comentaron voceros del Palacio San Martín. Los obispos, que llegaron caminando a la sede del Ministerio -y se fueron de la misma forma-, fueron recibidos por el secretario de Culto, Guillermo Oliveri, quien los guió hasta el despacho de Taiana. Además del cardenal Bergoglio (Buenos Aires), integran la Comisión Ejecutiva los vicepresidentes Luis Villalba, arzobispo de Tucumán, y Agustín Radrizzani, obispo de Lomas de Zamora, y el secretario general, Sergio Fenoy.
