El Tiempo más allá del Tiempo

“Tener y no tener tiempo”, un articulo que leí. Elijo tener, respetarlo en su máxima dimensión y honrar la oportunidad de vivirlo de la mejor manera posible. ¡Un hermoso desafío cada vez!

Por Amalia Maine (Rafaela)

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Otra vez el tiempo.

El artículo de tapa de la revista adncultura de La Nación del sábado próximo pasado se titula “Tener y no tener tiempo”. Movilizada por lo que sostienen los redactores me sumergí en lo que muchas de sus ideas activan en mi interior. Por momentos, se describe a Cronos, el dios del tiempo, como un monstruo que devora, al que hay que matar antes de que nos mate, contra el que hay que luchar. Por momentos, se lo persigue como a algo que se esfuma, que vuela, que transcurre velozmente, se escapa y se pierde. Por momentos, lo presentan como algo que ahoga, que oprime, que es insuficiente y no alcanza para hacer tantas cosas en tan poco tiempo. La falta de tiempo se convierte, a veces, en una sensación de incomplitud de la que no podemos liberarnos.

Estas y otras ideas más incluidas en el artículo provocan ciertas preguntas… ¿Será realmente que el tiempo no alcanza? ¿Es necesario correr detrás de él? ¿Para llegar a qué lugar? Y una vez que llegamos…¿cuál es la sensación? ¿Nos permitimos disfrutar el haber llegado por lo menos unos instantes?

Juguemos un rato. El tic-tac de los relojes manuales puede marcar la cercanía del hambriento cocodrilo que impulsa al famoso capitán Garfio a correr velozmente y escapar, una y otra vez, pensando que su tiempo se termina. La aguja marcando las 12 indica el momento irreversible en que la carroza se convierte en calabaza y el sueño llega a su fin. También, puede recordarle a Cenicienta la oportunidad que tiene de disfrutar todo ese tiempo mágico en el palacio hasta la medianoche… De igual forma, los tic-tacs actuales pueden recordarnos a los seres humanos cada una de las oportunidades que tenemos para vivir el momento que se presenta como único e irrepetible. Y la buena noticia es que tenemos tantas oportunidades de darle más vida a nuestro tiempo como tic-tacs decidamos escuchar! Hoy, los relojes digitales nos ofrecen la misma opción, con cada cambio de número en la pantalla o con cada movimiento sutil de las agujas.

El tiempo es tirano, dicen. ¿Es realmente así? Quizá le pusimos una etiqueta un tanto equivocada, reduccionista. Y si es tirano, también podemos cambiarle esa etiqueta. Las demandas cotidianas existen. Las exigencias de respetar ciertos tiempos establecidos existen. Los horarios, las agendas, los calendarios son organizadores. ¡Y bienvenidos sean para dar orden a nuestras acciones!

El tiempo es como es. ¿Por qué cargarlo de interpretaciones que nos limitan? El tiempo cronológico es una creación del hombre para organizarse mejor. Un concepto que podemos recuperar para utilizarlo a nuestro favor. La percepción de la cronología, el tiempo interno, es un valioso recurso del hombre que le permite flexibilizar su transcurso según sus intenciones. La persona puede, desde el momento presente, “capturar subjetivamente la magia del instante” y disponerse a vivirla plenamente. Aunque el instante parezca fugaz, no lo es tanto.

Entonces… el tiempo alcanza cuando le llevamos nuestra conciencia.

Un ser humano más despierto, en su aquí y ahora, puede elegir vivir cada momento de su vida personal y profesional tan plenamente como sea capaz. Siempre se puede elegir, aunque sea la forma de hacer alguna pequeña cosa. La decisión es de cada uno. La cronología sólo nos recuerda que, una vez, el hombre la creó para su beneficio. No nació con intenciones de esclavizar a su creador. Recobremos esos beneficios desde la conciencia, desde el reloj interno, con cada latido.

“Tener y no tener tiempo”, un articulo que leí. Elijo tener, respetarlo en su máxima dimensión y honrar la oportunidad de vivirlo de la mejor manera posible. ¡Un hermoso desafío cada vez!

Amalia Maine Docente Master Practitoner en PNL.

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