Cuando se mal interpreta el contenido evangélico

En la celebración ecuménica del miércoles último en la Catedral, dos integrantes de la comunidad Judía se sintieron molestos por la proclamación del evangelio de san Mateo. Se había convocado para rezar por la Patria. Salieron a responder pero el hecho no se inventó, según varios testigos presenciales.

Por Emilio Grande (h.)

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Durante la celebración ecuménica realizada el miércoles último en la Catedral San Rafael hubo algunas molestias por el contenido del evangelio proclamado, que correspondió a la liturgia del día, es decir no se cambió para el encuentro cuyo objetivo fue rezar por la paz, la justicia y la solución del difícil momento que atraviesa el país. En el evangelio de san Mateo (6, 1-6. 16-18) Jesús habla de la limosna, la oración y el ayuno, que eran los pilares de la fe hebrea. “Cuando des limosna, no lo vayas pregonando delante de ti, como lo hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para ser honrados por los hombres. Les aseguro que ellos ya tienen recompensa”, dice parte del mismo. Parece que no cayó bien entre las dos mujeres presentes de la Comunidad Judía de Rafaela: Elke Kurganoff y Mónica Kuschnir, según testigos presenciales, que confiaron a este cronista, quien estuvo ubicado al final del templo mayor de la diócesis de Rafaela. En el saludo de la paz y especialmente al final de la misa estaba convenido que las citadas y los pastores evangélicos Mario González (Iglesia Evangélica del Río de la Plata de Humbodlt) y Marcelo Becla (presidente del Consejo de Pastoral de Iglesias Evangélicas de Rafaela) hicieran oraciones, pero las integrantes de la comunidad judía siguieron molestas a tal punto que casi no quisieron hacer su oración, pero después cambiaron de idea. Una vez terminada la celebración ecuménica a la que participaron autoridades municipales, concejales, integrantes de la Sociedad Rural y numeroso público, la polémica continuó en el atrio de la Catedral entre esas dos mujeres y el obispo Carlos Franzini -presidió la misa concelebrada- y también se sumó el pastor Becla. A decir verdad, no hay que hacer malas interpretaciones sobre el contenido evangélico, más allá de la libertad que tiene cada uno en discernir el texto citado. En realidad, Jesús habló en sinagogas y lugares públicos de su tiempo, como lo haría ahora en los templos cristianos y no tendría “pelos en la lengua” en criticar a los hipócritas de hoy del doble discurso: que dicen una cosa y en la práctica hacen otra. Justamente, el Hijo de Dios busca ir más allá de los pilares de la fe porque estas prácticas deben hacerse en el corazón interior y para Dios que conoce las intenciones personales y no pensando en el qué dirá la gente. Este episodo citado me hace acordar cuando se estrenó la película “La pasión de Cristo” de Mel Gibson en el que hay citas textuales sobre el martirio que padeció Cristo llevado adelante por los judíos de hace 2.000 años. ¿O será que nos agarramos del texto evangélico según nuestras conveniencias para sentirnos supuestamente aludidos? No hay que desviar el eje de la convocatoria de aquella jornada: había que rezar por la patria…

Emilio Grande (h.)

La respuesta: diálogo interreligioso

El camino de diálogo interreligioso entre judíos y cristianos es un don de Dios para nuestro tiempo que hemos de agradecer, cuidar y profundizar. Como todo camino, está hecho de avances, demoras y retrocesos. Para llegar a la meta hay que tener voluntad de alcanzarla, perseverancia en la marcha, paciencia y comprensión en las demoras. Y no dejarse condicionar por quienes por imprudencia o desconocimiento ponen obstáculos a esta marcha. Por este motivo lamentamos profundamente una interpretación parcial e incompleta de lo acontecido en la hermosa celebración interreligiosa que compartimos el pasado día miércoles en la Catedral San Rafael, pidiendo por la paz, el diálogo y el encuentro entre todos los argentinos. Nos referimos a la nota publicada en este Diario en el día de ayer, en la pág. 22 con el título “Cuando se malinterpreta el contenido evangélico”. Creemos firmemente que Dios seguirá bendiciendo todo esfuerzo sincero en pos de la paz, el diálogo, la comprensión y la unión entre todos los argentinos, más aún entre creyentes.

Elke Kruganoff, Mónica Kuschnir y Carlos María Franzini

La crónica del encuentro ecuménico: “Qué tengo que ver yo en esta dura situación que atravesamos”

Fue el interrogante cuestionador de anoche que hizo el obispo diocesano Carlos Franzini durante la misa concelebrada en la Catedral San Rafael. También participaron representantes de las Iglesias Evangélicas y de la Comunidad Judía -quienes leyeron unas oraciones-, el intendente Omar Perotti y de la Sociedad Rural.

“La Providencia de Dios nos regala este texto de la liturgia de la Iglesia Católica que se lee en esta misa celebrada en este día, el evangelio de San Mateo es una invitación muy fuerte del Señor para poner las cosas en su lugar y a descubrir que el ámbito donde se juega la verdad más profunda de nuestra condición de personas religiosas no es la exterioridad, no es la manifestación pública ni lo ritual. Es el fondo del corazón creyente donde cada uno hace sus opciones y de cara a los hombres”. Así expresó anoche el obispo Carlos Franzini durante la homilía de anoche en la Catedral San Rafael, misa concelebrada por los sacerdotes de la ciudad, en la participaron también representantes de distintos actores sociales como Marcelo Becla (presidente del Consejo Pastoral de Iglesias Evangélicas de la ciudad), Elke Kurganoff (de la Comunidad Judía local), el intendente Omar Perotti, entre otros. Se rezó pidiendo por la paz, la justicia y la pronta solución del difícil momento por el que está atravesando el país. Y agregó: “No es lo que los demás ven, los que otros alaban y critican, lo que hace justa o injusta la conducta de una persona sino que Dios que ve en lo escondido del corazón ve y sabe de cada uno de nosotros”. “Muchas veces -continuó- queremos hacer cosas buenas que son leídas e interpretadas por otros de mala manera y esto no habilita la bondad de lo que hacemos; otras a la mirada de lo que nos ven no hacemos nada valioso y sin embargo Dios sabe de la recta intención con la que obramos. Esto es lo que hoy nos quiere proponer la palabra de Dios, volver a una actitud religiosa desde el fondo del corazón y no meramente exterior de cumplimiento formal, de pura expresión externa sin contenido fundante en el corazón creyente”.

Tercera convocatoria

En otra parte, dijo que “esta noche (por anoche) hemos querido reunirnos (la tercera convocatoria) sobre esta difícil situación que atraviesa nuestra patria. La palabra de Dios nos invita a volver a la interioridad y dejarnos cuestionar, para preguntarnos delante de Dios y su voz más profunda, nuestra conciencia, qué tengo que ver yo en esta dura situación que atravesamos, qué he hecho de bueno o de malo para que sea responsable, para que cada uno sea capaz de poner lo mejor de sí al servicio del bien común, deponiendo actitudes, gestos, palabras, acciones que no contribuyen de verdad al encuentro, la paz, la construcción común de esta casa de todos que es la nación”. En el momento del tradicional saludo de la paz, el obispo citó a Martin Luther King, mencionando un sueño: que se saluden De Angeli y D`Elia, los cuatro representantes de la mesa de enlace y la presidenta Cristina Kirchner, Perotti e Imwinkelried (presidente de la Rural de Rafaela). Finalmente, se hicieron oraciones a cargo de Mónica Kuschnir, los citados Kurganoff y Becla, y el pastor González de Humboldt.

Fuente: diario La Opinión, Rafaela.

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