“Corea del Norte es un país peligroso por armas nucleares”

Esta es la visión de Gustavo Zlauvinen, representante de la Organización Internacional de Energía Atómica (OIEA) ante las Naciones Unidas, durante una entrevista. Estados Unidos, Rusia, China, Francia e Inglaterra redujeron sus arsenales nucleares, pero no toman acciones concretas para destruirlas. Analiza los conflictos en Medio Oriente.

Por Emilio Grande (h.)

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“El 2006 fue un año atípico en los temas nucleares porque tuvimos el primer ensayo de un arma nuclear por parte de Corea del Norte. Este país había sido miembro de la OIEA, tenía sus instalaciones bajo las inspecciones de nuestra organización y en el 2003 echó a los inspectores, y desde entonces no hay control sobre las actividades nucleares. El año pasado usaron plutonio que estaba bajo nuestro control para producir un arma nuclear, la probaron en una caverna subterránea y la hicieron detonar. Coloca a este país como uno de los poseedores de armas nucleares y provocó una reacción negativa en todo el mundo por el peligro que esto representa”. Este es el balance que efectuó el rafaelino Gustavo Zlauvinen, representante de la Organización Internacional de Energía Atómica (OIEA) ante las Naciones Unidas en Nueva York, en una entrevista con este cronista. La sede de este organismo se encuentra en Viena (capital de Austria) y su director es Mohamed ElBaradei. Como ocurre en esta época del año, se encuentra de vacaciones en la ciudad que lo vio nacer y crecer, acompañado de su esposa Helena Ekeus y su hijo Alexander de un año y medio. Recordó que “desde la guerra de 1950-51, Corea del Norte y Estados Unidos están en un estado formal de hostilidades, técnicamente en un estado de guerra. Corea del Norte tiene un Estado totalitario, que está aislado del mundo con índices de pobreza elevados; se estima que unos dos millones de coreanos murieron a causa del hambre y del frío hace unos años y no producen muchas cosas. Por eso, la comunidad internacional está tratando que ese régimen modifique sus acciones especialmente en las violaciones a los derechos humanos. Este país es uno de los más peligrosos desde el punto de vista político”.

-¿Hay espacio para el diálogo? -En este momento se reabrió gracias a China, que es el interlocutor con Corea del Norte ya que su economía sobrevive gracias a los suministros de petróleo, energía y comida de los chinos. Pero China hace algunas presiones que posibilitaron reabrir las negociaciones en el marco del “grupo de los seis”. Empezaron a reunirse para analizar cómo solucionar este problema para que Corea del Norte renuncie a su programa nuclear, Estados Unidos levantaría alguna de las sanciones, se reestablecerían relaciones bilaterales y junto a la Unión Europea y Japón hay una promesa de ayuda humanitaria.

-¿Qué otros países tienen programas nucleares? -Irán está en el tapete en el campo nuclear porque su programa se viene desarrollando desde hace muchos años, ahora bajo el control de nuestros inspectores, pero durante 12 años no declararon ciertas actividades en el campo nuclear. Nos enteramos a través de la oposición política que está en el exilio y así nuestros inspectores empezaron a descubrir un número de actividades que no habían sido declaradas. Recordemos que Irán se comprometió hace 15 años cuando ingresó al Tratado de la No Proliferación Nuclear en no producir este tipo de armas y aceptar los inspectores. Salvo India, Pakistán, Israel y Corea del Norte, la mayoría de los 191 países aceptó este compromiso y por eso Irán tiene esa obligación.

-¿Están produciendo armas nucleares Estados Unidos y algunos países de la comunidad europea? -Esa es la otra cara de la moneda. En 1970 se estableció este tratado, pero las cinco potencias que habían ganado la Segunda Guerra Mundial (Estados Unidos, la URSS ahora Rusia, China, Francia e Inglaterra) tenían armas nucleares, pero se obligaban en el futuro se desarmen completamente. Lo que pasa es que no lo han hecho, han reducido sus arsenales nucleares, pero no están tomando acciones concretas para destruir todas las armas de este tipo y no hay una decisión política. Ese no cumplimiento del denominado “P5” hace que otros países especulen y no desistan de comprar armas nucleares. El problema es que no tenemos el mandato legal y político de controlar a los cinco países grandes como sí ocurre con la mayoría de los países.

-¿Qué análisis realiza de los conflictos entre Israel-Líbano y en Irak? -Se trata de Medio Oriente, una de las regiones geopolíticamente más relevantes e inestables del mundo. La acción militar de Israel la justificó cuando algunos soldados fueron tomados prisioneros por el grupo terrorista Hezbollah que desencadenó el conflicto bélico, pero Israel perdió políticamente, de hecho renunció el jefe del ejército israelí por el fiasco de esa campaña militar y el primer ministro de Israel está sufriendo presiones para renunciar. Este conflicto provocó una gran reacción negativa de muchos países árabes que se solidarizaron con la causa palestina. Todo el proceso de paz en Medio Oriente ha colapsado y no hay negociaciones en este momento y esto también complica la solución en Irak. En este país consideran que fueron invadidos por Estados Unidos y esto origina más violencia terrorista; es una situación complicada y no sé como se va a solucionar. El presidente Bush ha decidido incrementar el número de las tropas en Irak para estabilizarlo y luego retirarse. Muchos están comparando esta situación con lo que pasó en Vietnam cuando Estados Unidos se tuvo que retirar en 1973.

-¿Está lejos la democratización que perseguía Bush? -Yo creo que sí porque hay una inestabilidad muy grande debido a una redistribución del poder. Durante los últimos 90 años la minoría sunita fue la que gobernó a Irak; como consecuencia de la invasión en 2003 ahora los chiítas están a cargo por primera vez y se están tomando revancha. Los sunitas tienen los grupos guerrilleros que atacan a las fuerzas norteamericanas y el gobierno chiíta porque quieren retomar al gobierno.

-¿Cómo se explica el ahorcamiento de Sadam Hussein? -Justamente porque él era sunita y durante los últimos 25 años controló a Irak y ahora los chiítas tomaron venganza. El era culpable de muchos crímenes y hay una gran oposición mundial sobre cómo fue hecho el juicio y la necesidad o no de ahorcarlo. En lo personal estoy en contra de la pena de muerte y no era necesaria porque con habérselo juzgado, declarado culpable y darle prisión perpetua era más que suficiente. Matarlo no ayuda a estabilizar y democratizar a Irak y incita la violencia por parte de los sunitas. Además, la forma cómo fue ejecutado, con guardias infiltrados de los chiítas duros con ataques verbales y haber sido filmado, imágenes recorrieron el mundo. Estuvo mal manejado y tuvo que haber sido con una ejecución quirúrgica.

Emilio Grande (h.)

Fuente: esta entrevista fue publicada en el diario La Opinión, Rafaela, 25 de enero de 2007.

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